FESTIVAL DE CULTURA LIBRE DE MÁLAGA
(9 al 17 de marzo de 2007)
Coloquio del 12 de marzo: ¿CÓMO RECUPERAR LA CIUDAD? I
La Creatividad en los planes urbanísticos frente a la privatización del espacio publico. Propuestas de acción contra el Plan Especial del Puerto de Málaga
Rizoma
El primero de los tres coloquios que Rizoma promueve para las jornadas del festival de cultura libre de Málaga expondrá nuestra experiencia en relación con el Plan Especial del Puerto de Málaga que fue aprobado definitivamente hace dos años (tras una larga y conflictiva tramitación y la creciente oposición ciudadana al contenido del mismo), así como la manera que enfocamos el asunto de la participación pública, bastante diferente del habitual. Esto remite a la problemática general, cada vez más crítica, sobre la construcción del espacio público en nuestras ciudades y el papel de los técnicos, de los políticos, del poder económico y, por supuesto de los ciudadanos, generalmente marginados de las decisiones importantes que se toman sobre el territorio, es decir sobre una parte importante de las condiciones en que se desenvolverán nuestras vidas.
Fue antes el atractivo por la potencia del lugar que el impulso que luego nos lanzó contra lo que se estaba proyectando en el Plan Especial. En efecto, en un momento dado, tras algunas aproximaciones parciales, nos dimos cuenta de la gran riqueza paisajística del conjunto Puerto-Parque-Alcazaba-Gibralfaro, que luego se prolonga hacia los Montes de Málaga, así como de su extraordinario futuro si se pone suficiente atención a lo que este territorio nos está diciendo.
Los motivos principales de nuestra oposición a dicho Plan Especial pueden sintetizarse así:
• Aislamiento frente a la ciudad a la cual se endosa una fuerte carga económica, social, comercial y urbana
• Apropiación privada de las rentas de posición generadas por la ciudad y presentes en los terrenos del puerto debido a su excepcional posición geográfica, en relación con la misma ciudad de Málaga y por el singular atractivo de la especifica relación con el mar propia de los puertos
• Desconsideración de la escala territorial que un sistema como el puerto debería tener bien presente: el paisaje circundante, las relaciones con el centro histórico, su ubicación en un lugar muy delicado en cuanto a las comunicaciones costeras en el seno de la Costa del Sol, entre sus áreas occidental y oriental; y finalmente su conexión con otros sistemas de transporte y comunicación tales como el ferrocarril, el aeropuerto, el transporte público subterráneo y de superficie, más el sistema viario rodado para los automóviles privados.
Nuestra alegación argumentaba que, además de defectos graves en la documentación del Plan Especial, lo que se proponía iba en claro perjuicio hacia la ciudad y que se estaba perdiendo una oportunidad histórica en relación con el espacio urbano contiguo, especialmente en cuanto a la conexión con la Malagueta, con la parte monumental e histórica de la ciudad y con esa presencia próxima de los Montes de Málaga.
Pero nuestra crítica estaba acompañada de una alternativa que expusimos profusamente en la prensa y a la que hicimos referencia en la alegación: mostrábamos como eran posibles alternativas que resolvían perfectamente los problemas detectados, además de aprovechar la oportunidad histórica que se ha mencionado para mejorar radicalmente el espacio de la actuación y su contexto próximo.
Por otra parte detectamos la existencia de intereses que de ninguna norma manera se reflejaban en la documentación entregada y que sólo como sospechas afloraron en el debate ciudadano que tenía en esos momentos lugar. Una actividad en la sombra que ha sido decisiva en cuanto a la evolución y resultado final de este proceso; creemos que esto es un factor que siempre tendría que ser considerado y tratado en todas las actuaciones que tienen que ver con el territorio. Las ocultas estrategias están motivadas por las apetencias (de una virulencia que nos sigue sorprendiendo) de apropiación de lo que es común, de todos, y sólo son entendibles por la magnitud de las posibles ganancias.
En concreto, junto a los actores institucionales, es decir el ayuntamiento como representante de la ciudad y la autoridad del Puerto de Málaga (organismo perteneciente al Estado) se insinúa la actividad de una empresa extranjera, aparentemente experta en gestionar espacios de este tipo. Es la presencia de este tercer agente la que explica la actitud del Puerto, pero en este caso bastante facilitado por la, en nuestra opinión, complicidad o ceguera del propio ayuntamiento.
Aunque se trata de un asunto complejo no deja de ser un caso muy concreto; por ello sugerimos una serie de ideas que pueden prolongarse hacia un provechoso debate sobre la temática del planeamiento urbano y territorial en la actualidad:
• Los planes urbanísticos y la participación ciudadana
• Los ámbitos de soberanía estatales y el papel de la tecnocracia
• El modo de actuar del gran capital en el posfordismo o, como dice David Harvey, en el modo territorial de la acumulación flexible
• El dispositivo de cierre (social, espacial, político y económico) como pieza maestra en la estrategia de captura de la riqueza común
• Escuchar al territorio
• Un nuevo ecosistema artificial-natural o la innaturalidad de lo que creemos es natural
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Coloquio del 13 de marzo: ¿CÓMO RECUPERAR LA CIUDAD? II
Exposición de Proyectos de intervención urbana
Alumn*s de la Escuela de Arquitectura de Granada
Lo que se va a exponer en esta jornada son los trabajos de algunos estudiantes de la Escuela de Arquitectura de Granada, dos de ellos recientemente egresados.
Se trata casi de las primeras muestras con suficiente desarrollo de lo que podríamos llamar nueva sensibilidad en Andalucía hacia el territorio por parte de los profesionales de la arquitectura y del urbanismo, que por otra parte empieza a ser compartida por muchos de los ciudadanos corrientes, tengan o no formación universitaria.
En esta renovación generacional profunda radica nuestra esperanza de que el comportamiento destructivo al que hemos contribuido no pocos técnicos cambie progresivamente de signo. Como ocurre ya en otros países, esta manera de entender nuestra relación con el planeta forma parte de su modo de pensar y actuar, no es una moda ni tampoco una actitud impuesta, más o menos moralista.
En cierto modo el coloquio de este día es continuación del que hubo el jueves día 8 en el Colegio de Arquitectos de Málaga (que causó un notable impacto), con asistencia de un nutrido grupo de estudiantes de Málaga, más algunas venidas desde Granada.
Los ejemplos que se expondrán comparten ciertos rasgos destacados cuya simple enumeración ya proporciona una idea del cambio que suponen respecto a la actual práctica profesional de los arquitectos:
• Propuestas concretas y realistas; entendiendo esto último, no como continuación de lo que existe, sino como creación de una nueva realidad, es decir, invención
• El análisis de los problemas en su integridad compleja, de alguna manera consecuencia del nuevo paradigma conceptual que se podría enunciar como ecologismo generalizado (y que tienen el trabajo de Félix Guattari y «Las tres ecologías» una magnífica exposición)
• Una decidida actitud de colaboración pluridisciplinar, lo cual a su vez es síntoma de la emergencia de nuevos ecosistemas mentales y de una subjetividad supraindividual; de hecho el trabajo en equipo se está imponiendo sobre la autoría individualizada de una manera clara entre los jóvenes.
• Uso habitual y sumamente creativo de las tecnologías informáticas, lo que redunda en una gran potencia expresiva, facilidad de divulgación entre los profesionales y sobre todo entre la población afectada, contribuyendo a la comprensión activa por parte del ciudadano corriente, así como posibilidades inéditas de trabajo colaborativo a distancia.
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Coloquio del 12 de marzo: ¿CÓMO RECUPERAR LA CIUDAD? III
Debate abierto
Propuestas de participación activa. Iniciativas ciudadanas por otras formas de urbanizar
El tercer coloquio se plantea más abierto que los del lunes y martes, siendo como un pliegue de reflexión colectiva sobre lo ya expuesto y debatido anteriormente. El propósito inicial de esta última jornada es que sirva para avanzar proyectos para el futuro inmediato, dependiendo muy directamente esto de como se hayan desarrollado los coloquios previos.
Vemos como se generaliza la inquietud entre la ciudadanía corriente sobre el futuro, ya muy próximo, de nuestros territorios, entendiendo que ahí se incluye el porvenir de la misma especie humana. Se va imponiendo la convicción de que el problema ya no es ajeno a nosotros y que es preciso actuar.
Este gigantesco trabajo es obra de toda la sociedad, y probablemente habrá que tomar la iniciativa al margen de lo que se entienda, se diga o se haga desde las sedes tradicionales del poder. Es preciso construir una inteligencia distribuida que desborde completamente la clásica división entre los que saben (los expertos) y los que no saben, variante de la que se establece entre los que deciden (representantes en los aparatos del Estado y gobernantes) y los que se limitan a operar en una especie de dinamismo pasivo, el resto de la población.
Y si no los resolvemos no será por falta de medios económicos, de conocimientos o de inventiva (tal como en este tercer aspecto creemos va a quedar bien patente con lo que se exponga a lo largo de estas sesiones); el problema es fundamentalmente político, es decir, de cómo se disponen todos esos recursos y a qué finalidades se van a destinar.
Pensamos que hay una clara inadecuación de los instrumentos urbanísticos y de ordenación territorial (leyes, planes y gestión administrativa y técnica) en relación con la crisis medioambiental, pero también en relación con esa otra serie de consecuencias de trascendencia social que a menudo queda hurtada del debate: radical incapacidad para encauzar una desaforada actividad inmobiliaria claramente depredatoria, para contener la rampante corrupción que ya es estructural, es decir, institucional; y, por supuesto, para proporcionar a todos los ciudadanos elementales garantías en cuanto a sus necesidades de alojamiento y para disfrutar de una entorno urbano y territorial no degradado.
Al margen de los aspectos concretos que se deriven de las discusiones en los días anteriores sugerimos algunos temas que a modo de marco conceptual condicionan cualquier proyecto serio sobre la temática urbanística y sin cuya consideración serán imposibles actuaciones que vayan más allá del mero parcheo y consecuente aplazamiento de los efectos que se pretenden evitar. Son asuntos que es preciso que sean conocidos y debatidos por toda la ciudadanía, superando el miserable cuadro de mensajes y modos de pensar con que de un modo deliberado se está consiguiendo mantener a la mayoría de la sociedad en un estadio narcotizado y ajeno a sus propios problemas; esos problemas que se sienten más que se dicen, los que atañen más a lo corporal y afectivo que a lo cognitivo.
A continuación puntuamos de una manera muy breve cuáles son esos fenómenos generales que caracterizan nuestro tiempo histórico; un trabajo importante que tal vez se puede iniciar ahora es precisamente ver la manera en que estas temáticas generales se expresan y vinculan con lo que sucede al nivel mucho más restringido de los disciplinas urbanísticas dominantes y su aplicación a nuestro entorno urbano y territorial:
• Ruina de la democracia representativa y su correspondiente pérdida de legitimidad
• Incremento de los modos organizativos basados en las relaciones horizontales y en las redes
• Una economía política ya completamente desfasada que se ha vuelto pura ideología pseudocientífica para sostener el discurso de los poderes económicos políticos
• Aceleración de los procesos que hacen de las mutaciones y crisis fenómenos cada vez más frecuentes, haciendo inservibles los modos de pensamiento basados en procesos no lineales, dominantes en la mayoría de los saberes actuales
• La consideración del principal agente de transformación del territorio, es decir la población en general, de ninguna manera marginal ni carente de criterio e iniciativa
• La función de los expertos en el nuevo escenario, donde han perdido su clásico poder en beneficio de la instrumentación directa del capital
• De igual manera el cuestionamiento profundo del modelo jurídico basado en procesos trascendentes, centralizados, finalistas
• El modo en que el capital se acumula y circula en el territorio posfordista
• Y, como no, la profunda crisis medioambiental en ciernes
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